La comida no está mal, los tacos aunque pequeños están bien por el precio (1,5€) los torreznos vienen acompañados de tostones pero el precio es caro para la cantidad y calidad, estaban secos y algo pasados de cocción. Lo único que fue espectacular fue la tarta de queso ( la llorona) estaba realmente deliciosa , cremosa, no demasiado dulce y muy agradable en boca.
El ambiente es bueno, no había mucha gente. La camarera simpática.
Volvería solo por la tarta.
Todo buenisimo. Los nachos era una buena bandeja abundante para dos perdonas. El burrito de pollo lo partimos en dos también y era grande. Los tacos más bien pequeños pero las tortillas eran caseras y muy ricas.
El tinto de verano fue un acierto también. Buen precio.
Pedimos unos nachos takontento, tacos variados y dos postres: la llorona y la negra. Todo muy rico y calidad-precio de 10. Mención especial al taco soldadito, que fue nuestro favorito con diferencia!
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