Los precios de los platos principales (mantu y plov) me han parecido un poco caros si se piden fuera de menú pero merecieron la pena para probar platos auténticos y tradicionales de Uzbekistán. La verdad es que las comidas nos gustaron y eran todas hechas de manos. Además. Los tratos eran amables. Y el bar también llena de las decoraciones tradicionales.
Este sencillo restaurante ofrece la gran oportunidad de descubrir la comida típica de Urkidistan, además hecha de forma casera y a buen precio. Trato muy amable. Disponen de menú entre semana a 12,50 € La decoración es sencilla y no ofrece imagen de su lugar de origen salvo unos vestidos colgados en la pared, pero lo importante es descubrir otras formas de cocinar sin salir de tu ciudad.
Foodies Van Travellers
+4
Primera esperiencia en un uzbeko, buenas ensaladas la de remolacha muy buena, segundos muy sabrosos probamos plov y golupsi ,postres medovik exquisito, carta un poco escasa.
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