De paso unos dias por Mérida encontramos este magnífico bar-restaurante al lado de la casa de Mitreo; comimos bacalao dorado, muy rico,solomillo,muy blandito y sabroso y carrilleras...simplemente exquisitas,todo regado con un buen tinto de la zona. Cada plato son unos 10€, y el vino unos 2€ cada copa. De postre tomamos una tarta de chocolate super rica y unos cafes,todo por unos 45€,la calidad del producto es de 1a, desde los aperitivos(un surtido de tres quesos) hasta el café,asique el precio es muy bueno,cantidades abundantes,lo comimos todo y salimos "rodando".
Juan y Rosa son muy buenos profesionales en su trabajo,saben lo que hacen, comida riquísima a muy buen precio y trato muy bueno y cercano,te hacen sentir "como en familia " como ellos dicen. Seguid así,cuando volvamos a Mérida repetiremos sin dudarlo.
Lo encontramos de casualidad pero fue todo un acierto, local con aire acondicionado que se agradecia muchisimo, ademas el trato de los dueños super atentos y amables . La comida buenisima todo lo que pedimos, nos recomendo carridalla en salsa y que rica estaba, ademas con las bebidas nos puso embutidos de la zona que al final tambien le compramos de lo buenos que estaban. Recomendables al 100× 100.
Gracias por vuestra amabilidad si volvemos por alli repetiremos.
Comí muy a gusto y fueron muy atentos y majos. Totalmente recomendado.
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