Solo paré a tomar café, pero es un bar - restaurante muy bonito. Tiene una decoración muy chula, con un montón de trillos como mesas, pieles de serpiente, etc. El café me pareció muy bueno y el dueño amable. Da gusto parar en sitios como este. La próxima ruta que haga la organizaré para llegar a la hora de comer, que tiene pinta de que se come bien en este sitio
Muy buena atención. Comimos dos días, 28 y 29 de enero ... y cenamos solo caldo. Raciones abundantes y bien elaboradas.
Menú 18-20€, con amplitud para elegir. Aperitivo de encurtidos, cortesía, jarro generoso de vino de la casa (de Toro y de buen beber), y chupito de manzanilla invitación de la casa.
Cuando volvamos a Villafáfila es la referencia.
Tienen un menú de fin de semana muy completo, con su especialidad, arroz a la zamorana. Los platos son grandes y tienen buena variedad. En la barra tienes opciones de tapas muy ricas y elaboradas con tu vino o cerveza por si prefieres solo picar algo. Un buen lugar donde ir a comer un domingo después de haber hecho la ruta que da vuelta a las lagunas.
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