Fuimos por la tarde a las 19:30pm, el ambiente del local está bonito, pedimos de comer tamal de pollo, salchipapa, 1/4 pollo a la brasa, 1 sándwich de lomito y 2 porciones de torta de chocolate y torta de 3 leches.
Las porciones de la comida estuvieron muy generosas y el sabor muy agradable.
El sabor del pollo a la brasa si es difícil de igualar a cómo se prepara en Perú pero hacen un buen intento, el resto de los platos muy bien.
Lo recomiendo para los que quiere probar comida peruana, volveré en otra ocasión en hora de almuerzo para probar los platos marinos.
Los precios también me parecieron los adecuados todos los platos por menos de €10.
Entramos de casualidad a las 5 de la tarde para tomar algo por su bonita decoración.
Al final nos decantamos por pedir algo de picar, no soy asidua de restaurantes Peruanos así que no tengo punto de comparación pero todo estaba muy bueno, las patatas bravas junto con la yuca y el boniato nos gustó bastante, el arroz chaufa tenía un sabor delicioso y casero, los zumos son naturales, lo hacen al momento y la chicha dulce refrescante.
El único pero sería el precio ya que me pareció un poco elevado pero al menos no decepciona.
Comida peruana auténtica.El restaurante está llevado por gente de Perú, que saben lo que nos gusta comer aquí en Barcelona y enseñando nos unos platos que nunca habíamos probado, por lo menos en mi caso. Un servicio inmejorable y raciones muy generosas. Su oferta de pasteles caseros es una parte tan exquisito que hay que probar. Muy recomendable 👌
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