El ambiente del restaurante es exquisito y el trato del personal muy amable, entramos con la intención, en principio, de tomar unas cañas pero debido a sus ricas tapas muy bien presentadas y generosas pero sobre todo sabrosas decidimos pedir par de raciones y ya comer. Las alitas a la brasa son las mejores que he comido!!
Lo recomiendo 100%
Situado en un lugar privilegiado, con un servicio exquisito, y una comida de una calidad excepcional, es de obligada visita en Granada, eso si no os olvidéis de reservar!!! Se recomienda sobre todo la carne acompañada de un buen vino…la carta de vinos es bastante amplia….y solo el pan con aceite de oliva ya es de 10!!! Pero….perdon por mi insitencia pero un plato de patatas fritas con 2 huevos encima….NO SON HUEVOS ROTOS…..por lo demás excepcional!!!!!
Fuimos a este lugar por recomendación. Pedimos la ensalada de gambones, la presa ibérica el croquetón y pan al horno. Todo estaba muy rico, especialmente y sin duda alguna la carne. Solo hacer mención a la tempura del gambón ya que, dado el buen nivel de cocina del restaurante, dejaba que desear un rebozado tan grueso que se podía retirar el mismo por su gran grosor. Muy buen servicio. Recomendado sin duda!!
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