Hacía tiempo que quería probar este restaurante indio y por fin pude ir. Puedes reservar mesa a través de Google o llamando por teléfono pero no es necesario. Si vas pronto tienen mesas libres y en hora punta también puedes encontrar alguna mesa. El restaurante se encuentra en primera línea de playa y tiene una terraza muy grande con muchas mesas y una sala con bastantes mesas también. La decoración es sutil y elegante, no como otros indios que he ido y tienen una decoración muy cargada. El servicio es muy atento y simpático, te explican los platos y te aconsejan sobre sus comidas típicas. La carta es bastante grande pero al mismo tiempo muy simple. Tiene varios platos de entrantes, ensaladas, platos preparados del Chef, también tienes salsas con variedad de cordero, pollo, ternera, gambas y verduras. Todas ellas salsas son las mismas en todos sólo cambia el ingrediente principal. También tienes platos de arroz preparados y arroces sueltos para mezclar con las salsa. Tienes también los típicos panes preparados por ellos. En nuestro caso pedimos un mix de verduras, todas ellas fritas con harinas de legumbres y especiadas. También nos trajeron las típicas tortas con tres salsas (esto es opcional, ya que te preguntan si quieres), como platos principales pedimos un arroz basmati y un arroz con champiñones, acompañados de pollo tikka masala y pollo con salsa picante. Para acompañar este plato pedimos, pan de queso. Todo muy bueno de sabor, textura y en su punto. Si es verdad que con tanta especia es difícil definir algunas cosas pero, he ido a bastantes restaurantes indios y este es uno de los mejores, sobre todo el trato. Me gustó mucho y lo recomiendo 100%.

Comida rica, sabrosa y variada. Buenas recomendaciones de los camareros, muy amables. Cantidades no muy abundantes para el precio, pero merece la pena. Tomamos Naan de Queso, Entrante de Pollo al curry, Cordero Tikka Masala, Pollo a la Mantequilla y Veg Jalferezi. Todo muy bien, repetiremos.