Bueno, bonito y barato.
Local con una entrada amplia, con mesas altas perfectas para un aperitivo y con un salón principal cuando finalizas el pasillo de entrada.
Ambientado con el skyline de Madrid, el local cuenta con varias mesas, dos barras y un servicio súper cercano y amable.
Fuimos a comer y pedimos 2 platos + postre a compartir:
- Taglitelle al Tartufo: INCREÍBLES. Fue lo que más nos gustó. Si os apetece pasta, y os gusta la trufa, sin duda un plato que merece mucho la pena.
- Albóndigas de Rabo de Toro: bien hechas, buen sabor y una salsa increíble (tuvimos que pedir más pan). Viene acompañado de patatas.
- Tarta de Zanahoria: la mayoría de postres son caseros. En este caso, no quedaba el que querríamos (fuimos a última hora) y nos recomendaron esta tarta. Estaba espectacular, muy recomendable.
Volveremos. Buen sitio para comer por Chamberí por un precio muy bueno.
Bien servicio, calidad precio también,todo muy rico.
Buen local y buen ambiente, precioso!
El personal es muy amable y agradable, siempre con una sonrisa y dispuestos a ayudar en la elección.
La comida está muy rica, aunque he de decir que la pasta estaba demasiado blanda, nada que ver con una buena pasta al dente, una lástima.
Precio adaptado al local y a la calidad de la comida, pagamos 21€ por persona, con 1 principal y 1 bebida por persona, entrante y postre a compartir.
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