Comida para 12 con menú cerrado. Buen servicio. Local elegante. Los embutidos de buena calidad. Las croquetas de sabores variados, muy parecidas, deberían marcar con más claridad la diferencia. El rulo bien presentado y arreglado. Ensalada bien. Plato final, bacalao, lo mejor sin duda, pero sin alardes. También había solomillos. Postres al centro flojos, falta sabor. En general falta rotundidad de sabor al menú, pero se puede decir que cenamos bien. Nadie se acabo el plato final. Cafés y chupitos.
Aunque no hay nada malo que se pueda decir de este sitio, quiero resaltar lo maravillosos que son los camareros. No solo son amables sino que se esfuerzan, realmente, en que te sientas a gusto y disfrutes de la experiencia. A destacar, a petición de él, el buen hacer de Juan Pedro.
En cuanto al menú, muy bueno y a buen precio (10€).
No obstante, recomiendo el filete de secreto, acompañado de verduras y patatas y el rulo de queso de cabra, ambos auténticas delicatessen.
Volveré, sin duda.
Excelente servicio . La calidad es insuperable. Merece mucho la pena . Ingredientes de primera calidad a un precio muy muy aceptable . Es una maravilla y de lo mejor de la zona.
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