Solo por ver el desparpajo y la gracia de la persona que nos atendió (supongo que el propietario), merece la pena visitarlo.
El local es pequeño, con terraza y ambientado en el mundo del toreo. De hecho oí decir a este señor que había sido novillero.
Estuvimos un día laborable y pedimos menú. Tomamos de primero ardoria (salmorejo en otros lugares) y de segundo dorada a la plancha; de postre una tarta de chocolate, que parece flan y estaba rica, y piña. La correspondiente bebida y el pan incluidos en el menú y el precio 11€ por persona.
La relación calidad/precio muy bien.
Como punto mejorable, echamos de menos un mantel, de papel al menos.
He venido recomendado y la verdad que ha sido un acierto, me he sentado al lado de la puerta de la cocina y le he dicho al dueño Toky, que dejara la puerta de la cocina abierta para que fuera comida con espectáculo con las inestimables cocineras Ángeles, Patricia y Coral. Pero no ha hecho falta porque el dueño brilla con luz propia y te hace pasar una maravillosa velada junto a la comida exquisita por supuesto.
Taberna muy concurrida y popular de situación céntrica. Tomamos una copa de vino blanco frisante con unas tapas exquisitas, tartar de atún, espinacas con garbanzos y salmorejo. El servicio muy simpático.
An error has occurred! Please try again in a few minutes