Restaurante que ofrece unos platos muy elaborados y muy ricos. El personal es inmejorable y profesional. Ya hemos estado un par de veces y repetiremos.

Después de realizar unas compras en el mercado municipal de Tortosa, decidimos buscar un sitio de nuestro gusto para probar la cocina de la zona pero con toque moderno. La página web del mercado ofrece mucha información útil y decidimos decantarnos por uno de los dos restaurantes de cocina de autor. Empezaremos diciendo que ha sido un más que agradable acierto. Nos acercamos en persona ha reservar la mesa para más tarde y ya ojear un poco el local. Establecimiento un tanto peculiar para el tipo de comida que ofertan, pero tiene si explicación. A los postres, tuvimos la suerte y oportunidad de hablar con el dueño y cocinero del restaurante y nos indicó que esos techos y paredes de ladrillo corresponden a la decoración de un anterior establecimiento hostelero, en este caso, dedicado a la pizza , así que sorprende un poco el comedor, pero he de mencionar que ha conseguido dentro de lo posible que tenga un cierto aire elegante e innovador. Resulta acogedor en un primer vistazo. La atención a la mesa es agradable y simpática. Un pequeño detalle a corregir: en el menú diario que ofrecen no es necesario dar a probar el vino, pero comiendo a la carta, como hicimos nosotros, se hace necesario. Pasemos a los platos, de principio a fin más que correctos, se alcanza un equilibrio entre el producto y el sabor dentro de su elaboración. Te quedas con la sensación que has comido rico y que el plato en su conjunto está bien elaborado. Todo muy rico, ahí están las fotos de los platos y sus presentaciones. En el postre contamos con el asesoramiento del dueño y eso nos dió más ventaja: deliciosos. Para rematar, una más que agradable conversación sobre productos de la tierra y dónde adquirirlos, una información que siempre es muy de agradecer. De verdad, muchas gracias por vuestra excelente atención, por vuestra información y saber que no ha caído en saco roto: vamos a la caza del buen aceite. Un beso y hasta pronto. Por cierto, que no se me olvide mencionar esa deliciosa receta de la abuela que merece la pena elevar a los altares.