Cenamos entre dos personas una noche en Santander, pedimos unas cervezas y la San Miguel que tiene es muy buena, para empezar a picar pedimos un pan de ajo, estaba muy muy bueno y todo casero, nos gusto muchísimo y junto al aceite picante que puedes pedir era un vicio. Pedimos una pizza de beacon para compartir y era una locura, la masa es muy buena, es entre masa Romana y napolitana, los ingredientes eran de primera calidad, volveremos a repetir si o si cuando volvamos a Santander, de precio es muy económico pero la calidad que tiene… es brutal! La amabilidad del servicio y el trato fue exquisito, nos trataron muy bien y estuvieron muy atentos durante la cena, sinceramente el día anterior paseando por esta calle ya quisimos entrar porque el olor a pizza que hay en el ambiente es impresionante, esta gente sabe hacer pizzas y hacerte disfrutar con ellas!
Muy buena calidad - precio. Local un poco estrecho, pero acogedor. La atención fue muy buena. Las pizzas están muy buenas, masa crujiente y fina. Las tostas bien. El hummus quizás menos comino, pues perdía sabor
Las mejores pizzas de la ciudad. El local es pequeño pero tienen otro muy cerca con mayor capacidad y las mismas pizzas (además en este local, El Bulín, cuentan con milanesas). No os olvidéis de comer el TIRAMISÚ, está buenísimo. Si queréis más información sobre nuestra experiencia en este loca, podéis consultarla en @comocomeelmulo
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